El pasado domingo todo el mundo recordaba aquel día en que el mundo se paralizo al comprobar que era cierto el horror que los EEUU estaban viviendo. Era un 11-S que todo el mundo recordaría y que la historia de la humanidad guardaría para siempre. Creo que todo el mundo sabe a que me estoy refiriendo, si a la caída de las emblemáticas Torres Gemelas a manos de terroristas islámicos, o por lo menos eso nos contaron en su día y nos siguen contando.Pero este post no va hablar de aquel día como miles de medios de comunicación han hecho y hacen a día de hoy. El pasado domingo los medios de comunicación españoles, no se el resto, se hicieron eco de las emotivas ceremonias de recuerdo a todos ellos que murieron aquel fatídico día. Hasta aquí perfecto, es verdad que fue horrible y espero que nunca vuelva a ocurrir algo así, ojala el verbo matar no existiera. Pero mi cabreo y mi indignación llegan cuando me paro a pensar y reflexionar, y me doy cuenta que mis queridos medios de comunicación, mis adorables políticos y de mas basura de este mundo, se olvidan de nombrar y de recordar aquellos hombres, mujeres, niños y niñas que han pasado a mejor vida, a manos de otros hombres que por ordenes de aquellos buitres que manejan el mundo han actuado sin ninguna dudad en nombre de su querida patria.
Así que sólo me queda decir algo, que miremos la "otra cara de la moneda", que es igual o más dura que la que nos enseñan y nos pintan aquellos que mueven el mundo.
